Alqvimia, la marca española pionera en cosmética natural, llega a nuestro país con una cabina al poniente de la CDMX, donde ofrecerán faciales, corporales, masajes y rituales holísticos.
Me encanta cuando nuevas marcas de lujo llegan al mercado mexicano porque me comprueba algo que ya todas sabemos: la belleza es el mercado más noble que existe y siempre está en crecimiento.
Si no te suena aún este nombre (sobre todo escrito de esta manera tan particular, déjame platicarte que Alqvimia es una marca española de lujo cuyas formulaciones de productos incluyen aceites esenciales de la máxima pureza y calidad, ya que no le quitan ni le ponen ningún tipo de molécula natural y/o sintética (yo no sé mucho de química, pero esto suena bien, ¿no?).
Lo que nos explicó Marisa Lozano, anfitriona del evento de lanzamiento de Alqvimia en México, es que los aceites esenciales con finalidad cosmética que se mezclan con los productos son one-of-a-kind. La razón es que Idili Lizcano, fundador de la marca, ha creado un proceso muy específico para ellos, basado en las técnicas alquímicas más ancestrales.
¿En qué consiste este proceso tan especial? En dejar que los aceites se maceren durante 15 días en una sala de reposo y oscuridad a fin de conseguir su máxima estabilización y momento óptimo de energía.
Una vez estabilizados y armonizados, los aceites esenciales dan lugar a un perfume y unas cualidades excepciones que los dejan listos para ser incorporados a los productos cosméticos y que juntos nos aporten un bienestar holístico, completo e integral.
El conocimiento profundo de los ingredientes y las formulaciones con aceites esenciales hacen que las fórmulas de Alqvimia sean únicas, placenteras y muy efectivas.
En casi 40 años que lleva la marca, se han asegurado de utilizar los aceites esenciales más puros y de la mejor calidad, que adquieren en los mejores lugares del mundo con el propósito de mantener intacto el alto contenido de familias moleculares. Esto para garantizar la excelencia cosmética de sus productos y conservar la tradición placentera del autocuidado.
LA MAGIA DE ALQVIMIA
Los tratamientos (faciales y corporales), masajes y rituales de Alqvimia están desarrollados a partir de la sabiduría de la alquimia ancestral y tienen como objetivo evocar sensaciones y proveer beneficios tanto a nivel físico como sensitivo, energético y emocional.
La ideología de la marca es que cada cliente es único e irrepetible, con una carga energética variable en función de lo que piensa, come, respira, siente y actúa. Esta también es la razón por la que cada producto de Alqvimia está creado con una polaridad determinada: yin, yan o un mix de yin y yang.
Los tratamientos en cabina están basados en las necesidades diagnosticadas de cada cliente y el equilibrio de canales energéticos, lo que hace de cada sesión una experiencia mágica, única y personalizada.
Alqvimia cuenta con un método único de diagnóstico que permite definir, según la polaridad yin-yang, cuál es el producto o servicio más acertado para cada cliente en ese momento.
Las terapeutas-cosmetólogas evalúan el estado energético de la persona y eligen los aceites esenciales, las formulaciones alquímicas, los masajes y los rituales de spa ideales para devolverle el equilibrio.
Las manos expertas de las terapeutas logran la mejor experiencia imaginable de bienestar holístico. ¡Compruébalo por ti misma!
AGENDA TU CITA
Alqvimia llega a México de la mano de expertas cosmetólogas para consentirnos con faciales, corporales, masajes y rituales.
La cabina está ubicada en Palo Santo 16, Col. Lomas Altas, 11950, al poniente de la CDMX. Te dejo aquí el teléfono para que agendes tu cita: 55 5259 3446
Los productos estarán a la venta en la cabina y a través de la cuenta de Instagram: @alqvimiaofficial_mex
Recuerda usar los hashtags #alqvimiamexico y #universoalqvimia cuando compartas tu experiencia, especialmente porque los productos que te apliquen a ti muy posiblemente no sean los mismos que me apliquen a mí.
¿Por qué? Porque, como ya lo mencioné, las cosmetólogas tienen un método único de diagnóstico que permite personalizar las sesiones, así que aunque sea lo mismo (digamos un facial), todas viviremos una experiencia –literalmente– sinigual.