A raíz de que mis lentes estaban sobregraduados (thank you very much, Devlyn), te cuento que los cambié por unos Transitions, que además de estar increíbles (¡el armazón es rosa!), tienen una tecnología increíble: las micas se adaptan a los cambios de iluminación.
Los estrené apenas ayer para andar en bici ¡y no sabes la diferencia! Yo sufro porque cuando uso lentes de sol, sacrifico el ver bien. O a veces ando haciendo desfiguros usando unos arriba de otros y así… Pero con los Transitions eso no fue necesario porque la mica se oscurece o aclara dependiendo de dónde estés.
Lo mejor de todo es que bloquean los rayos ultravioleta al 100% —certificado por el Consejo Mundial de Optometría y la Asociación Americana de Optometría—, así como un porcentaje significativo del espectro de luz azul-violeta, la que emiten el sol y los dispositivos móviles: celular, TV, lap, etc.
No importa cómo veas, te recomiendo muchísimo usar este tipo de lentes, pues evitan la fatiga ocular y el clásico deslumbramiento que tanto puede lastimar nuestros ojitos, además de cuidarlos de otros factores como la contaminación. Y sí, es cierto que hay que invertirle, ¡pero hay que hacerlo con gusto! Todo sea por cuidar la vista que, de verdad, es uno los tesoros más valiosos que tenemos #priceless.