Un poco de mí

Vivo en el D.F. hace 15 años, así que a veces siento que ya soy más chilanga que mazatleca, pero allá viví épocas demasiado felices como para olvidarlas. Tuve una niñez y juventud súper privilegiadas, gracias a Dios y a mis papás que se la rifaron muy cañón para divorciarse de la manera más civilizada que he conocido jamás.

Estudié Comunicación en la Anáhuac (del Norte), literal le atiné porque no tenía ni idea, según yo decía que Turismo, ya sabrán… Terminando la carrera me regresé a Sinaloa, pero tardé más en empacar que en regresarme a La Gran Ciudad. En el inter perdí algunas cajas y cuadros que aún me pregunto dónde habrán quedado. ¿Adornando una linda casa? Espero…

Si no mal recuerdo, a los 24 empecé a trabajar en una agencia de relaciones públicas, pero me entró el tema humano y me cambié al área de las fundaciones. Trabajé en tres.

Durante un verano, gracias a la buena ortografía que tanto trabajo le costó a mi madre, tomé el Taller de Redacción del periódico Reforma y ahí me di cuenta que mi verdadera pasión era escribir; ese curso intensivo me hizo ver que desde una redacción podía ser el eslabón que siempre había deseado entre las personas que quieren ayudar y las que requieren ser ayudadas. Según yo la mezcla perfecta entre RRPP y ONG. Estuve tres años y fue la mejor escuela.

Corría el mes de noviembre cuando me mudé a Editorial Televisa, donde fui editora de sociales de la revista Caras. A los dos años y medio cambié de domicilio a uno mucho más glamouroso (o sea a la revista Glamour, de Condé Nast), donde fui editora de belleza durante casi tres años.

Fueron épocas increíbles, pero todo en esta vida tiene un ciclo y yo cumplí el mío. Ahora trabajo en la revista Central, de Proyecto 40/TV Azteca, y abrí este blog porque la belleza me apasiona. Mucho más que la moda.

No están ustedes para saberlo ni yo para contarlo, pero en prepa me inscribí a Cultura de Belleza, carrera técnica que dejé cuando la maestra tuvo que rapar a mi “modelo” de corte masculino. Literal me dio pánico, pensé que me estaba esperando afuera para golpearme.

Lo mejor fue que un día que regresé a Mazatlán –años después– y me hice manicure en el Taboo Spa, ¡la niña que me atendió había sido mi compañera! Recordamos entre carcajadas mi debut y despedida del mundo del estilismo.

Cuando viví en San Francisco, allá por el 2000, me inscribí a la Barbizon Modeling School, donde me enseñaron a caminar, maquillarme y a «creérmela» que de verdad podía ser modelo (había participado en varios concursos anteriormente, así que esto sólo reforzó mi teoría, que luego obviamente evalué de nuevo). Quiero aprovechar este espacio para agradecerle a mi papá haber pagado el dineral de las comp cards, de las cuales usé cinco –que quedaron entre la familia.

He tomado clases, cursos y seminarios de todo y todo me gusta porque todo se me da (¡qué humilde!), menos la cocina… Todavía no me he dado el tiempo de pulir esa habilidad. Pero en serio me considero una persona multitasking. Mi coco es esa frase que dice “el que mucho abarca, poco aprieta”. Si no existiera, me sentiría mucho más en paz.

Además de bailar (jazz, ballet, flamenco, hip hop, ritmos latinos, porristas, gimnasia olímpica, silla, pole), estudiar Kabbalah y estar cursando las últimas cinco materias de la Maestría en Ciencias de la Familia (que nadie sabe qué es ni para qué sirve), me gusta leer, ir al cine, escribir –como se podrán dar cuenta–, ver series de televisión y dormir. También comer, pero tengo muy buen umbral del hambre (no así del dolor, soy muy sacatona).

Me gusta que soy una persona muy positiva y alegre, un poco loca y desesperada, sí, pero creo en el poder del amor y de los milagros. Entonces aunque de repente me tiro al drama (por razones justificadas, según yo) confío plenamente en que al final “everything is going to be OK”. A veces no lo creo mucho con la cabeza pero me obligo a creerlo con el corazón. Les digo que estoy medio lurias.

Será un placer que estemos en contacto a través de este espacio.
No los conozco y ya los quiero, xoxo.

Bianca

pd. les dejo un video que me encanta porque salgo súper sonriente y muy guapa jiji 🙂